Hablando de roles, Papá? Mamá?

Ser madre soltera…

No es nada del otro mundo, no voy a entrar en detalle de todos los momentos en los que he sentido un trato distinto, desde lo bueno hasta lo malo e injusto.

Pero hoy eso me tiene mucho sin cuidado, soy una mujer de 26 años, he recibido una muy buena educación y he aprendido mucho en estos años vividos como para poder lidiar con esas circunstancias “incomodas”.

Ahora… “Ser hija de una madre soltera…”

He sentido de cerca lo que es vivir solo con mamá, solo con papá, recuerdo las innumerables veces en las que realmente necesite que ambos formen parte de mi vida al “mismo tiempo” y no por separado, no quería esperar el “fin de semana” para poder abrazar y tal vez llorar en los brazos de mi madre… ni aguardar cuando le toque a papá, y decirle que realmente tal persona me pone muy incómoda y que no respeta ni toma en serio el que yo viva solo con mamá.

…Lastimosamente ahora a mi nena le ha tocado vivir solo conmigo, hay tanta tela que cortar en este tema, podría llenar miles de páginas dándoles mi punto de vista o explicándoles como lo siento… como me afecta y como me deprime en ocasiones.

…La ayuda enorme que recibo de mi familia, como sería si ellos no me apoyaran?

…El hecho de que al menos su padre la busca, o intenta hacerlo, es algo por lo que sé que debo agradecer.

…Lo difícil que es dejar de lado los recuerdos bonitos y ponerte firme en una decisión que sabes que es la mejor para tu hija.

…Lo realmente complicado que es ponerte fuerte y ser la única persona que realmente le pondrá limites, tendrá que castigarla, tendrá que decirle NO, y… quien tendrá que consolarla…

Pero que pasara cuando yo tenga que ponerme fuerte y castigarla y tal vez sobrepase el límite de lo que alguna vez imagine que sería un castigo, o me equivoque en hacerlo… ella necesitara a alguien que la tome suavemente y apegue su hombro para consolarla y al mismo tiempo explicarle que fue castigada por “aquello”, ese debería ser mi papel, pero ahora ese papel queda a cargo de quien este por aquí cerca.

El otro papel, el de castigarla, papel que ahora cumplo, debería ser de su padre, hoy estuvo mi hermana, Dios sabe cuánto agradece mi corazón porque ella la haya consolado… pero me invade una tristeza e impotencia absoluta imaginar que alguna vez no estará nadie, y ella se sentirá sola, sin tener a nadie más que la consuele.

El papel de mamá y papá es tan justo, la obra de Dios y el plan que tiene con nosotros es tan perfecto, aun así nosotros volteamos de página, intentamos decir: “No, no le faltara nada”intentamos ver como algo “normal”una familia desintegrada y escupir incluso la perfecta imagen de una familia.

Yo lo hice, dije que “jamás” desintegraría mi hogar, entiendo cabalmente cual fue mi parte en la separación con el papá de Ariadne, pero obviando todo aquello, dejando de lado si fue el o fui yo la persona que tuvo más culpa… dejando todo aquello de lado, no puedo dejar de estar triste por ella…

Yo cometí errores y será su corazón quien en algún momento tendrá que pagarlo, tendrá que hacerse fuerte por muchas cosas que abre empezado yo, tendrá que aprender a vivir con algunas faltas… y si, lo sé, no será la única, y eso es aún más triste, ver como de a poco vamos acostumbrándonos e incluso sintiéndonos a “GUSTO” con la imagen de una familia desintegrada…

Madre soltera…

Padre soltero…

Abuela criando a nietos como si fuera la madre…

Tías haciéndose cargo de sobrinos…

Hermanos mayores lidiando con niños…

Hoy los sentimientos me quisieron ganar en más de una ocasión, y tuve que encerrarme por unos segundos mientras me calmaba y seguía con mis labores de trabajo… y más… con mis labores de “Madre”, y no dejo de agradecer que hoy mi hermana mayor estuviera aquí al lado mío para ayudarme en esto que es realmente difícil.

a ella...

Seré quien tenga que poner los limites siempre, y al mismo tiempo tendré que consolarte, no sé si siempre pueda ser “justa” o llenar todo lo que tú necesitas de tu “papá y mamá”, pero solo puedo prometer, y prometerme que siempre, siempre haré lo mejor que pueda hacer, hasta en los peores momentos recordare que de por si te impuse el deber de tener que ser “fuerte” en esta vida, y por ello también es mi responsabilidad ser justo lo que necesitaras en cada momento de tu vida.